miércoles, 30 de noviembre de 2011

Derrotó Santiago de Cuba a Ciego de Ávila


Santiago de Cuba iguala con los avileños
Escrito por Luis Sánchez del Toro
     El equipo de Santiago de Cuba alcanzó su primera victoria en la actual LI Serie Nacional de Béisbol, al derrotar a su similar de Ciego de Ávila con pizarra de 9 carreras por  tres en un partido celebrado en el estadio José Ramón Cepero, en la central provincia de la Mayor de Las Antillas.
     Un racimo de cuatro carreras en la primera entrada frente al lanzador abridor Osmar Carrero, decidieron en el encuentro frente a Los Tigres quienes en cinco capítulos solamente conectaron  tres imparables y anotaron una carrera frente al zurdo santiaguero Denny Alá Beltrán, quien se presentó en tarde de gala. Los indómitos agregaron otras dos anotaciones en el quinto y sexto episodios, respectivamente,  así como otra en la octava entrada para alcanzar el triunfo que iguala la subserie entre ambos conjuntos.
    Por los avileños también lanzaron Yadir Rabí, Víctor Baró,  Dachel Duquesne, Lázaro Santana  y Mario L. Neira, mientras por las Avispas santiagueras subieron al montículo Osmi Tamayo
    A la ofensiva por los ganadores sobresalieron  el cuarto bate Rolando Meriño con dos inatrapables y tres carreras impulsadas y los veteranos Pedro Poll y Reutilio Hurtado con dos hits cada uno, e igual número de impulsadas. El segunda base de Santiago de Cuba, Héctor Olivera conectó jonrón. Los vencedores a la defensa no cometían errores y conectaban 11 imparables, mientras los avileños conectaban cinco incogibles y jugaban sin error al campo.
     Nuevamente los indómitos alinearon con una poderosa alineación ofensiva donde se incluyeron Alexei Bell, Edilse Silva, Luis Miguel Navas y Reutilio Hurtado.La subserie entre ambos equipos concluye este jueves con el tercer juego pactado a partir de la 1:00 p.m en el estadio José Ramón Cepero, de Ciego de Ávila.

Rememoran alzamiento armado de Santiago de Cuba


Rememoran alzamiento armado de Santiago de Cuba

Escrito por José Ginarte Sardina

Fotos: Francisco Hechavarría

       Con la colocación de ofrendas florales del líder histórico de la Revolución Cubana Fidel Castro y  del presidente de los Consejos de Estado y Ministros, Raúl Castro Ruz  , en la tarja que recuerda a los combatientes revolucionarios caídos durante el ataque a la estación de la policía  del gobierno de Fulgencio  Batistas, situadas la Loma del Intendente , comenzaron hoy la actividades por el 55 Aniversario del levantamiento armado de la ciudad de Santiago de Cuba en apoyo al desembarco  del Yate Granma.
       Tres jóvenes revolucionarios que ofrendaron sus valerosas vida en aquella acción llevada a cabo, junto otras ,  el 30 de noviembre del año 1956 bajo el mando de Frank País García, también  fueron colocadas  ofrendas en nombre del Pueblo de Cuba, del Consejo de Estado y de Ministros y  de los familiares de los mártires.
     Estudiantes de las enseñanza primaria y secundaria en medio del estampido de balas de salva y dando gritos de Viva la Revolución y a abajo Batista, en horas de la mañana de  hoy reeditaron  simbólicamente el ataque al otrora enclave de la policía batistiana, actualmente Museo Histórico de la Lucha Clandestina,  ante la presencia  de una representación de protagonistas de aquella  insurrección armada   que conmocionó  a la cuidad y que tenía como objetivo apoyar el desembarco de los expedicionarios del Granma ,quienes debido al mal tiempo se retardaron y lo hicieron tres días después ( el 2 de diciembre),  por playa Las Coloradas.
       Pedro García Lupiañe, unos de los protagonistas del alzamiento , recordó pasajes de aquella acción y destacó la capacidad organizadora de Frank País Gracía y el apoyo brindado a los combatientes por el pueblo santiaguero.
     Los miembros del Secretariado del Comité Central de Partido Comunista de Cuba,  José Ramón Balaguer Cabrera y Olga Lidia Tapia,  así  como el Comandante del Ejército Rebelde, Julio Camacho Aguilera y  el primer secretario del Partido en la provincia Santiago de Cuba, Lázaro Expósito Canto y otros dirigentes del Partido, el gobierno y las organizaciones de masas, junto a una nutrida representación del pueblo ,  asistieron a este acto recordatorio  de las acciones del 30 de noviembre de 1956, en las que se vistió por primera vez el uniforme verde olivo que luego acompañaría a los revolucionarios que lucharon en la Sierra Maestra y otros sitios del pais contra las fuerzas de la dictadura que oprimía en aquel entonces al pueblo de Cuba.
     A modo de homenaje, en esta ocasión,  también se colocaron ofrendas florales en el  Callejón del Muro, sitio donde el 30 de julio de 1957  fue vilmente asesinado Frank País García por esbirros de la tiranía  batistiana, así como en obelisco  de La Placita, lugar  habitual de encuentro de los  revolucionarios que  participaron en el levantamiento armado del 30 de noviembre y en la tumba de la familia País García y del panteón eregido en el cementerio Santa Ifigenia a  los Mártires del 26 de Julio de 1953 y a los  Caídos en la Insurgencia.

   

miércoles, 23 de noviembre de 2011

"Donde único podíamos hacer algo efectivo, era en Santiago”

                                                    30 DE NOVIEMBRE
     Por estos días finales de noviembre –el penúltimo mes del año- recorro las estrechas y empinadas calles de la ciudad de Santiago de Cuba. El intenso ir y venir de su gente por sus populosas y atrayentes arterias como Enramadas, Trocha, el Paseo de Martí, Garzón, Aguilera, Carretera del Morro, y avenidas como Patricio Lumumba, Yarayó, Manduley… entre otras hacen revivir la historia, la rebeldía y hospitalidad de una tierra que siempre está de conmemoraciones.
    En esta oportunidad, a 55 años de la épica epopeya del alzamiento del 30 de Noviembre de 1956, en apoyo al desembarco del yate Granma, la heroica ciudad de Santiago de Cuba, ubicada en el extremo suroriental de la Mayor de Las Antillas rinde honores a su héroes y mártires y trabaja a favor de consolidar el triunfo del Primero de Enero de 1959, y las conquistas de la Revolución.  
        Un poco de historia acerca de los sucesos del 30 de Noviembre de 1956, quisiéramos revivir en estos momentos mediante la reproducción de tres entrevistas publicadas en Granma, Órgano Oficial del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, en ocasión de celebrarse el 50 aniversario de esa gesta. Ellos son Vilma Espín, Haydée Santamaría y Armando Hart, tres destacados revolucionarios.

"Donde único podíamos hacer algo efectivo, era en Santiago”
Se conmemora el aniversario 50 de aquella de la epopeya heroica del 30 de noviembre, en que un grupo de jóvenes se lanzó a las calles de Santiago de Cuba y otras poblaciones orientales, para, al mismo tiempo que realizaba acciones audaces, distraer a las fuerzas represivas de la tiranía y con ello facilitar el desembarco del Granma, ocurrido dos días después.
En 1963, el periódico HOY, diario del hasta entonces Partido Socialista Popular, publicó esta entrevista con tres participantes directos de aquellos hechos, Vilma Espín, Haydée Santamaría y Armando Hart, presidenta de la FMC, Directora de la Casa de las Américas y Ministro de Educación en aquel momento, respectivamente, quienes narraron algunos incidentes de aquellos días, en una amena conversación que sostuvieron sobre el particular con varios compañeros redactores del periódico.
HAYDÉE.— Transcurrían los primeros días de noviembre. Días antes, en una reunión con Frank País, habíamos acordado reunirnos con él en Santiago de Cuba. Durante esta conversación, después de analizar la situación, decidimos que donde único podíamos hacer algo efectivo era en Santiago.
HART.—La reunión fue en La Habana. Tres o cuatro semanas antes, Frank había ido a México.
VILMA.—Fue muy rápido todo. Frank nos dijo que había que conseguir una casa en Santiago, donde yo estaba... y eso costó trabajo.
HART.—Salimos para Santiago, creo que el 14 de noviembre.
HAYDÉE.—Teníamos que cambiar de ómnibus por la madrugada.
HART.—Nos apeamos en Victoria de Las Tunas u Holguín, no recuerdo, creyendo que estábamos en Camagüey.
HAYDÉE.—Alquilamos una habitación en un hotel y conversábamos sobre la posibilidad de ir a visitar a un tío nuestro que reside en esa ciudad.
HART.—Pero cuando me asomé a una ventana y vi la calle, comprendí que no estábamos en Camagüey. El ómnibus se nos fue y llegamos a Santiago como a las tres de la tarde.
VILMA.—Y entonces... a buscar casa. Armando iba como profesor de la Universidad de Oriente.
HAYDÉE.—Nos alojamos en una casa de huéspedes, donde estuvimos viviendo antes del 30 de noviembre, durante esos días y hasta el mes de febrero en que vinimos para La Habana. Para todos los de la casa, yo me llamaba María.
HART.—Estuvimos allí tres meses sin problemas.
HAYDÉE.—Se podía actuar en Santiago, se recibía una gran cooperación.
HART.—Y el centro de operaciones era la casa de Vilma, en un lugar tan céntrico como San Jerónimo.
VILMA.—Cuatro meses, con vigilancia colaboradora de todos los vecinos, que nos avisaban cualquier movimiento raro de las fuerzas represivas.
HART.—Toda la manzana entera.
VILMA.—Mi papá era Cónsul de Francia y esto, al principio, cohibía un poco a los esbirros. Pero, después, nada los detuvo. En la casa nos reuníamos aún después de que comenzaran a vigilarnos. Nos hicieron un registro en enero, sin que lograran nada. El segundo lo hicieron el 6 de abril y ya no pudimos volver allá. Tuve que sumergirme entonces en la vida clandestina completa. Y a mediados del 58, me quedé en el Segundo Frente.
LOS TELEGRAMAS
HAYDÉE.—Había dos cables donde se anunciaba la salida de los compañeros del Granma, de México, el 27.
VILMA.—Había que contar 3 días después, para realizar las acciones de Santiago.
HAYDÉE.—Uno iba dirigido a Arturo Duque de Estrada en Santiago. Y el otro, de confirmación, a La Habana.
HART.—Al hotel Royal Palm, creo, que era un punto de correo nuestro, donde recibíamos la correspondencia de México.
HAYDÉE.—Ese papel se lo comió Aldo (Santamaría) cuando lo cogieron preso, pues lo llevaba consigo.
HART.—El martes 27, al mediodía, vino Frank a vernos corriendo. Me levantó en peso, no obstante ser más bajito que yo, y me dijo que había llegado el cable.
HAYDÉE.—Traía un papelito en la mano, pero tenía una cara tan expresiva y tan contenta, que no tenía que hablar.
HART.—Desconozco si los dos telegramas (el de Santiago y el de La Habana) eran iguales.
30 DE NOVIEMBRE
HART.—Los planes de las acciones del 30 de noviembre los hizo Frank. El era el jefe de acción. El segundo era Pepito Tey.
VILMA.—Se había preparado a cada grupo por separado. Se citó a los jefes de grupo, que sabían lo que tenían que hacer cuando sonara el morterazo sobre el Moncada. (Se atacaría la Estación de Policía, la Marítima y se bloquearía el Moncada, sobre el cual caerían morterazos de una pieza que debían manejar Lester Rodríguez y Josué País, hecho que no se pudo realizar al caer los dos presos. Los dos primeros objetivos se lograron, aunque con la pérdida de Pepito, "Tony" Alomá y Otto Parellada en el asalto a la Policía.)
HAYDÉE.—Aunque no sonara el morterazo, todo debía comenzar a las 7 a.m. Al no sonar, pues lógicamente se produjo alguna confusión.
VILMA.—Anexo a estos planes, existía la posibilidad de otras acciones. Para ello se contaba con las brigadas juveniles. Y, además, se pasaría una cinta por la radio con un llamamiento.
Nosotros teníamos que ir a dormir a Punta Gorda el 29, pero Frank planteó que tenía que quedarse alguien para entregar la cinta... y esa fui yo.
HART.—En la grabación, después de hablar obreros y estudiantes, yo hacía un llamamiento, anunciando que Fidel había llegado a Cuba. La cinta se grabó en casa de Vilma, con una grabadora que era del maestro de Frank. En La Habana, creo que a Enrique Oltusky le habían dejado otra cinta grabada, que tampoco se pudo pasar. Desconozco si aún la tiene.
VILMA.—Asela de los Santos y yo nos quedamos con la cinta. Se la entregamos a las 6 de la mañana al técnico convenido de la CMKW y le dijimos que la pasara a las 7. Cogimos una máquina y fuimos a la Compañía de Teléfonos, donde nos aguardaba un compañero que iba a pasar por las líneas telefónicas a toda la isla el llamamiento que saldría por la radio.
A todo el mundo se le había dicho que el 30 no sería el de la acción, sino una prueba. Todos o casi todos acudieron. Pero cuando se les dijo lo que iba a ocurrir, hubo algunos que se negaron. Uno de ellos fue el técnico de la CMKW, que quemó la cinta... se asustó.
LA SALIDA DE PUNTA GORDA
HART.—Pasamos la noche del 29 en Punta Gorda.
HAYDÉE.—Salimos en una caravana de autos. Iba en la primera máquina, contrario a cuando el asalto al Moncada, en que iba atrás. En este carro estábamos Frank, Armando y Taras (Domitro).
HART.—Detrás, algunas otras máquinas con un grupo de compañeros.
HAYDÉE.—Recuerdo que le hablé a Taras de la similitud de aquella carretera de Punta Gorda con la de Siboney y la impresión que me producía, sobre todo al mirar hacia atrás.
HART.—Llegamos al cuartel general a las 6:30 ó 6:45 de la mañana. Estaba situado en San Félix y Santa Lucía.
VILMA.—Yo llegué a esa casa, después de entregar la grabación, casi parejamente con ustedes. Aquí teníamos que ir recibiendo la llamada de todos los jefes de los grupos, a medida que iban saliendo. Yo recibía la de Pepito, informando que ya salía.
Además de las acciones planeadas, había cientos de muchachos listos para entrar en acción. No se sabía lo que podía pasar. Algunos de aquellos muchachos cayeron presos. Específicamente, recuerdo a "Papucho".
HART.—Varios de ellos estaban en la Estación de Policía, que fue incendiada por el grupo de Pepito. Algunos estuvieron a punto de morir carbonizados, "Papucho", que tenía entonces 17 años, entre ellos. Llegó todo quemado a casa de Vilma.
VILMA.—Y Martí Pérez medio asfixiado. Los habían salvado los bomberos, que apagaron el incendio por detrás del edificio.
HAYDÉE.—Y es que era impresionante ver a aquellos muchachitos con sus brazaletes en las calles.
VILMA.—Incluso con el uniforme verde olivo. Los que participaron en las acciones los vistieron.
HART.—Hay que decir que el espíritu revolucionario de Santiago era algo extraordinario. Vivíamos allí sin problemas. Nos paseábamos por las calles y aun después del 30 de Noviembre... y más aún, después de caer presos.
VILMA.—El jefe del Cuartel era Frank. Yo estaba allí porque teníamos una serie de botiquines y enseñábamos a un grupo de muchachas los primeros auxilios. Todos los botiquines tenían su equipo, para auxiliar a los heridos. Heridos hubo pocos y los graves fueron llevados al hospital, como aquel muchacho al que le atravesaron un pulmón.
Al concluir las acciones, había que abandonar el Cuartel y tratamos de salvar las armas. Le hablé a Frank que debíamos ir hacia una casa que estaba al fondo, donde vivía un médico para esconder las armas. Al mismo tiempo, se consideró la posibilidad de ir hacia la Sierra y se enviaron dos mensajeros para ver cómo estaban las salidas de Santiago.
HART.—Aquel día pasamos varios sustos. Uno de ellos se produjo cuando Haydée y yo regresábamos de tratar de conseguir una casa para trasladar las armas. Haydée se quedó en la acera de enfrente, mientras yo tocaba la puerta del Cuartel. Entonces, los vecinos de los altos creyeron que quien tocaba la puerta era la policía y pusieron sobre aviso a Frank y demás compañeros. Haydée, desde enfrente, les hacía señas de que abrieran e interpretaron que quería decirles que era la policía. Por poco el propio Frank me dispara.
VILMA.—Mientras llegaba la respuesta de los mensajeros, discutimos varias veces si íbamos o no para la Sierra.
HAYDÉE.—Yo tenía la experiencia del Moncada, e insistía en irnos. "Aquí nos van a matar", decía.
VILMA.—Yo consideraba que no de-bíamos irnos. "Podemos repetir todo lo que hemos hecho y quedarnos igual, quedaría desorganizado el movimiento", opinaba. Al final hubo que desechar la salida a la Sierra: los caminos estaban bloqueados. Salí al doblar de la esquina a buscar la casa. Habíamos encontrado un cielo raso donde podíamos esconderlas. Antes de regresar al Cuartel, llegan Armando y Haydée, diciéndonos que teníamos que irnos, que estábamos rodeados.
HAYDÉE.—Nos había dado la impresión esa, por un avión pequeño que volaba muy bajo.
VILMA.—Yo estaba empecinada en no dejar las armas. Dije que se me había quedado dentro de la casa una identificación y tenía que recogerla. Entré y recuperé mi maletín de primeros auxilios que no me resignaba a perder. Haydée entró conmigo y soltó a las dos muchachas que trabajaban en aquella casa y que todo el tiempo estuvieron encerradas en un cuarto.
HAYDÉE.—Tamaño regaño me gané por eso de Frank. Las mujeres no corrían ningún peligro. Las soltamos. Les dijimos que pasábamos por allí en aquel momento, pues desconocían que formábamos parte del grupo que ocupó la casa. Ellas, al salir, parece que comentaron lo ocurrido, y saliendo nosotros llegó la policía. Por cierto que cuando yo entré contigo, llené una cartera muy grande que tenía con armas cortas y gran cantidad de balas.
¡Cómo pesaba!
VILMA.—Por cierto, que se nos ocurrían cosas tremendas a cada momento. Poco antes de abandonar el Cuartel, abrimos el refrigerador y lo encontramos lleno de huevos.
HAYDÉE.—Teníamos en la mente lo del Moncada, el hambre aquella, y dijimos: "Si vamos para la Sierra, nos llevamos estos huevos salcochados".
VILMA.—Metimos los huevos en una gran olla que en definitiva se quedó allí y al otro día apareció retratada en los periódicos. Yo me había pasado aquel día preparando batidos de fruta bomba para los muchachos.
AQUELLA BARRIGA AZUL
HAYDÉE.—Íbamos para San Jerónimo, cuando llegó la policía. Entramos en una casa (yo llevaba la cartera que casi se me caía) hasta que no hubo peligro.
VILMA.—Como a la una de la tarde, Haydée y yo le dijimos a Armando que íbamos a comprar emparedados. Lo que hicimos fue ir hasta las cercanías del Cuartel General, para ver cómo estaba la situación y si podíamos recuperar algunas armas. Cuando llegamos a la esquina, lo que primero vimos fue la barriga de gran tamaño de un policía que salía de allí. ¡Nunca olvidaré aquella barriga azul! Haydée y yo nos miramos con cara de desilusión, pues aunque no nos habíamos dicho nada, las dos ha-bíamos salido con la misma idea: sacar las armas.
HART.—Después, estuvimos dos o tres días sin ver a Frank.
VILMA.—Aparte de las acciones de Santiago, se hicieron las de Nicaro, en donde mataron a Rafael Orejón; de Palma, que atraparon a Oscarito Chaín cuando bajó a Santiago; de Ermita y Guantánamo.
HART.—Frank había venido organizando grupos de acción en toda la provincia. Tuvimos contacto con él después del Moncada y habíamos preparado algo para las elecciones del 54, que no se pudo efectuar. Pensábamos atacar numerosos colegios electorales, con el propósito de acopiar armas. Ya nos habían ocupado las granadas de Salud 222. Había tenido contacto con nosotros en La Habana. Recuerdo que Fidel, poco después de salir de la cárcel, nos dijo en una reunión que "en Oriente contamos con un tipo formidable". Le contesté que era Frank País. Y Fidel me preguntó: "¿Cómo tú lo sabes?". Frank, y con él numerosos grupos, se incorporó al Movimiento a través de Lester Rodríguez, que era el jefe en Oriente. Frank era entonces el jefe de acción allí, después el Jefe Nacional de Acción y más tarde Coordinador Nacional.
VILMA.—Aquel día de las elecciones del 54, nos la pasamos Frank, Rafael Rivero, Nitza (hermana de Vilma) y yo dando vueltas en una máquina a ver qué se podía hacer.
¿SE ADELANTARON?
HAYDÉE.—Las acciones de Santiago creo que se adelantaron.
VILMA.—Frank me dijo que había que realizar las acciones al tercer día de haberse recibido el telegrama.
HAYDÉE.—Pero de todas maneras, estuvo mal. Debimos habernos enterado primero del desembarco e inmediatamente producir las acciones. Nos hubiéramos enterado por la movilización de tropas y aviones. Nosotros, la orientación que teníamos era no tirarnos en Santiago hasta que no se hubiera producido el desembarco. Esto trajo por resultado que todas las fuerzas de la tiranía se concentraron sobre nosotros en Santiago. Por las condiciones excepcionales en que nos encontrábamos en Santiago, podíamos muy bien haber estado acuartelados 3 ó 4 días, hasta que desembarcara Fidel. Hubiéramos ayudado más y desperdigado a las fuerzas represivas.
HART.—Nos enteramos del desembarco el mismo día que se produjo. Estábamos tristes y preocupados y Frank nos vino a ver y nos dijo: "Ahora, a unir a los campesinos y realizar acciones, que esto será una bola que nadie podrá detener". Tuvo un concepto clarísimo de lo que sería la lucha en el campo.
VILMA.—Se hicieron viajes a La Habana y se inició la reorganización.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Ya se dieron a conocer los peloteros santiagueros a la Serie Nacional


Ya se dieron a conocer  los peloteros santiagueros a la LI Serie Nacional

Santiago de Cuba, con  32 destacados peloteros, seleccionados por  su alto rendimiento individual, volverá  a  la 51. Serie Nacional de Béisbol, la cual será inaugurada oficialmente el próximo 27 de noviembre en la occidental provincia de  Pinar del Río.
    La nómina del equipo indómito estará encabezada por el experimentado  receptor Rolando Meriño Betancourt.
    Alcides Sánchez, director del conjunto santiaguero afirmó que el propósito del equipo es ganar juego a juego para clasificar a la postemporada y luchar por el campeonato, pues contamos con atletas de calidad y experiencia competitiva.
     "Santiago de Cuba debe estar en la pelea”, expresó Higinio Vélez, Comisionado Nacional de Béisbol, quien se refirió a la necesidad de trabajar fuerte para no cometer los mismos errores de la temporada anterior, cuando el conjunto quedó fuera de los play off.
      Las Avispas santiagueras, dirigidos por el debutante manager Alcides Sánchez, cuentan en su nómina con los receptores Rolando Meriño, Alexis Durruthy, Rudelis García y Miguel Ángel Téllez.
     Como jugadores de cuadro estarán disponibles Pedro Poll, Yosvani Hurtado, Héctor Olivera, Luis Miguel Nava, Edilse Silva, Michel Gorguet, Leandro Lamadrid, Daniel Aguilera, Luis Yander La O y el único novato del colectivo Yessander Rodríguez.
     Los jardines serán defendidos por Alexeis Bell, Reutilio Hurtado, Joaquín Carbonell, Ruden Sánchez y Maikel Castellanos.
     Entre los lanzadores destacan los abridores Danny Betancourt, Osmel Cintra, Yaumier Sánchez y Alaín Delá, así como los relevistas Alberto Bicet, Osmani Tamayo y Carlos Manuel Portuondo.
      Completan el staff de pitcheo Alejandro Bicet, Pedro Agüero, Carlos González, Viladimiro Torres, además de los zurdos Denny Alá y Ediasbel Valentín.
Una nómina donde se conjugan  juventud, experiencia y mucha fuerza al bate, aunque la incógnita está en el pitcheo, particularmente, en la forma que se presenten sus abridores teniendo en cuenta que ya no estará en el elenco de lanzadores el derecho de Siboney Norge Luis Vera Peralta. Alentador para los aficionados orientales la presencia del máscara Rolando Meriño.
     Santiago de Cuba tiene potencialidades materiales para luchar por el cetro en esta campaña beisbolera, comentó Jorge Campos, presidente de la Peña Deportiva de la Plaza de Martes, quien añadió que las primeras subseries frente a Ciego de Ávila, el próximo día 29 en su debut, y luego ante Sancti Spíritus e Industriales, servirán para medir la fuerza del conjunto indómito

jueves, 10 de noviembre de 2011

LA VILLA DE LA HABANA ESTÁ DE CUMPLEAÑOS


LA VILLA DE LA HABANA ESTÁ DE CUMPLEAÑOS
    El pasado 16 de noviembre la Villa de La Habana, fundada en 1519, por el conquistador español  Diego Velázquez de Cuéllar festejó su 492 cumpleaños de instituida.
    También conocida por el nombre fundacional de Villa de San Cristóbal de La Habana, así como por los sobrenombres de Llave del Nuevo Mundo y de Ciudad de las Columnas por el escritor cubano Alejo Carpentier, esta pintoresca y populosa urbe es también uno de los centros económicos y culturales más importantes de América Latina y el Caribe.
    La Habana fue la sexta villa fundada por la Corona Española en la isla de Cuba, llamada San Cristóbal de La Habana, tal vez porque era el patrón de los navegantes, y La Habana, como toponímico indígena. En la Plaza de Armas, que fue en la época colonial el centro de la vida oficial y pública de la ciudad, se alza un monumento llamado El Templete, que conmemora la fundación de la villa en ese lugar 1519. En su columna conmemorativa hay una inscripción en latín, casi borrada, que traducimos como sigue:
    "Detén el paso, caminante, adorna este sitio con un árbol, una ceiba frondosa, más bien diré signo memorable de la prudencia y antigua religión de la joven ciudad, pues ciertamente bajo su sombra fue inmolado solemnemente en esta ciudad el autor de la salud. Fue tenida por primera vez la reunión de los prudentes concejales hace ya más de dos siglos: era conservado por una tradición perpetua: sin embargo, cedió al tiempo. Verás una imagen hecha hoy en la piedra, es decir el último de noviembre en el año 1754".
     En ese lugar, bajo una ceiba, se celebró la primera misa y el Cabildo recibió la guarda y custodia de los fueros y privilegios de la villa de La Habana, según costumbre y usanza de las leyes de Castilla. La columna conmemorativa fue erigida por el gobernador don Francisco Cagigal de la Vega en 1754, cuando la ceiba no pudo sostenerse más.
    No obstante, antes de la fundación de La Habana, en su emplazamiento actual, la ciudad tuvo, entre 1514 y 1519, por lo menos dos asentamientos distintos: el original de 1514, que uno de los primeros mapas de Cuba (Paolo Forlano, 1564) la sitúa en la desembocadura del río Onicaxinal justo a orillas de la Playa Mayabeque, en la costa sur de Cuba y otro asentamiento en La Chorrera, junto al río Almendares, que los indios llamaban Casiguaguas, donde los fundadores trataron de represar las aguas, conservándose en la actualidad los muros de contención de esta obra hidráulica, la más antigua del Caribe.
    La Habana resurgió en varias ocasiones de los escombros y cenizas a que la reducían de cuando en cuando los piratas y corsarios franceses durante la primera mitad del siglo  XVI, hasta que en 1561 la Corona dispone que la ciudad sea el lugar de concentración de las naves españolas procedentes de la colonias americanas antes de partir para la travesía del océano, por lo que se construyen defensas militares a la entrada de la bahía de La Habana y en sitios estratégicos y logran hacer de ella la ciudad mejor defendida del Nuevo Mundo.
   Oro y plata, lana de alpaca de Los Andes, esmeraldas de Colombia, caobas de Cuba y Guatemala, cueros de la Guajira, especias, palo de tinte de Campeche, maíz, patatas, mandioca, cacao son las materias primas que llegan en los veleros al puerto mejor protegido de América, entre marzo y agosto, para formar los grandes convoyes que, custodiados por las naves militares, parten en días señalados rumbo a España.
    El día 20 de diciembre del año 1592, Felipe II confiere a La Habana el título de ciudad, veintinueve años después de que el gobernador de Cuba trasladara a ella su residencia oficial desde Santiago de Cuba, sede hasta entonces del gobierno de la isla.
La importancia estratégica de La Habana y las riquezas que a ella llegan y de ella parten la convierten en codiciado objetivo de piratas y galeones con patente de corso de las potencias enemigas de la Corona Española.
    La Habana se fortifica durante el siglo XVII por mandato de los reyes que la suscriben como "Llave del Nuevo Mundo y Antemural de las Indias Occidentales". Al mismo tiempo, la ciudad se edifica con los materiales más abundantes de la isla: las maderas, que proporcionan a la arquitectura de la época un encanto peculiar en combinación con los estilos llegados de la Península Ibérica y, muy profusamente, de Canarias.
   En 1763 se comenzó la construcción de la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, la mayor de las construidas por España en el Nuevo Mundo, que apuntaló el sistema defensivo de La Habana tras la ocupación inglesa. Las obras se prolongaron por más de once años y con un coste tan enorme para su tiempo que se dice que Carlos III, Rey de España se asomó a la ventana de su palacio con un catalejo para que le indicaran donde se encontraba tan cara construcción. Su posición privilegiada le convertía en un bastión inexpugnable. Contaba con un elevado número de cañones fundidos en Barcelona en el siglo XVIII, que siguen guardando simbólicamente la entrada de la Bahía de La Habana.
    La Habana es la ciudad capital de la República de Cuba, su ciudad más grande, principal puerto y centro económico y cultural. Es la sede oficial de los órganos superiores legislativo, ejecutivo y judicial del Estado, de todos los organismos centrales y de casi la totalidad de empresas y asociaciones de ámbito nacional.
    Desde hace unos años, el centro histórico de la Ciudad de La Habana, declarado monumento nacional por el Gobierno Cubano en 1976 y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1982, es objeto de restauraciones, realizadas por un equipo de historiadores y arquitectos dirigidos por la Oficina del Historiador de La Habana, Eusebio Leal, encargado de los trabajos de renovación.
    Ocupa el decimocuarto lugar en extensión entre las provincias con 721,01 kilómetros cuadrados, representando el 0,7 por ciento de la superficie total del país. Es la provincia más pequeña del país y la más poblada, con alrededor del 20 % de la población.
 
    El puerto de La Habana es el más importante de Cuba y durante la época colonial fue uno de los centros estratégicos para España, es por ello que la bahía se protegió con una red de fortificaciones muy importante, que incluyen al Castillo de la Real Fuerza, Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro, Castillo de la Punta, la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, el Castillo de Atarés y otros baluartes dedicados a la protección del puerto y la ciudad.
    Bajo la influencia estadounidense, la ciudad creció y se enriqueció con numerosos edificios en la década de 1930, cuando se construyen suntuosos hoteles, casinos y espléndidos clubes nocturnos. Ejemplos de estas construcciones están el Focsa, el Habana Hilton (nombrado actualmente Habana Libre) y el Hotel Nacional de Cuba.
    Muchas de estas transformaciones se reflejaron en las construcciones después de 1959. Tales son el imponente Hospital Hermanos Almejeiras (para el que se adaptó el edificio del Banco Nacional de Cuba que se encontraba en fase de terminación en 1959), numerosos hoteles (muestra de una mayor preocupación por el turismo desde 1990, luego de perderse el subsidio de la antigua URSS modernos como el Meliá Cohiba, Panorama o Meliá Habana, que imitan las fachadas de los rascacielos del Primer Mundo.
       Ciudad Natal del poeta y escritor modernista José Martí, y conocida como la llave del Nuevo Mundo y antemural de las Indias Occidentales por su ubicación estratégica, cumple como una de las ciudades más importantes de América Latina para eventos ubicados en el área del Golfo de México.
    En la ciudad también se encuentra la Casa de las Américas, institución encargada de promover el arte y la literatura de los pueblos de habla hispana, desde el río Bravo hasta la Patagonia, y que anualmente auspicia un certamen literario conocido como Casa de las Américas o sencillamente Premio Casa, y del cual han sido jurado personalidades tan distinguidas como Gabriel García Márquez y Mario Vargas LLosa.
    En la Habana además hay gran variedad de centros nocturnos como discotecas, cabarets, teatros, etc; donde los habaneros y turistas tanto nacionales como extranjeros pasan las coloridas noches de la ciudad. Existe todavía un título nobiliario de la corona española referente a esta ciudad, concretamente Marqués de la Habana, que data del tiempo de la colonia.
     El Museo de Bellas Artes posee una de las mejores colecciones de arte universal en el continente y la mayor de arte cubano del mundo. La ciudad también auspicia anualmente la Feria Internacional del Libro de la Habana, que luego se extiende al resto de las provincias del país. La sede principal del certamen es en la fortaleza Morro-Cabaña, al este de la ciudad, y tiene subsedes en todas las librerías de la capital.

El Cauto, es el río más largo de Cuba


El Cauto, es el río más largo de Cuba
Nace en Santiago de Cuba y está entre los más importantes del archipiélago cubano
    La provincia  de Santiago de Cuba tiene la particularidad de tener dentro de su pintoresca extensión territorial al río más largo del país: el Cauto, que nace en Sierra Maestra, en el extremo suroriental de la Isla, y fluye hacia el noroeste y, posteriormente, hacia el oeste hasta el Golfo de Guacanayabo en la costa sur.
    Su cuenca hidrográfica nace desde el lugar llamado La Estrella, en el municipio de Palma Soriano, provincia de Santiago de Cuba, a una altura de 600 metros sobre el nivel del mar, brotando en la ladera norte de la Sierra Maestra, Las Tunas, Holguín y Granma, esta última con mayor porción. La superficie de su cuenca tiene una extensión de unos 8.928 km², con una longitud de 343 kilómetros, que representa el 8,1% del territorio nacional.
     La cuenca del Cauto actualmente, está sometida a numerosos proyectos, encabezados por el gobierno cubano, contra la contaminación y la sequía presentes por el uso irracional de sus recursos durante años. Estos proyectos persiguen el objetivo de proteger la flora y la fauna, mediante la reforestación, eliminación de fuentes contaminantes y medidas de educación ambiental beneficiando a la naturaleza y al hombre.
      Desde el año 1959, el gobierno cubano ha buscado mejorar el ecosistema que se encuentra presente en el río, creando instituciones gubernamentales que se encargan de la manutención de las leyes y llevar un constante monitoreo de la situación del río.
     Debido al uso irracional de los recursos naturales que dispuso el río Cauto, junto con algunos factores climáticos, han hecho que el río Cauto haya disminuido la flora y fauna que habitan en el en torno natural de este afluente.   En el año 2003, la cantidad de árboles que aún se encontraban en el afluente se estimó en un 11% del área total del río.
      Algunos estudios mostraban que la carga contaminante en el entorno del río llegaba a las 24 mil toneladas por año, que, sumando el inadecuado sistema de drenajes de los cultivos, hacía que el hombre degradara la cuenca del río. Como un factor ambiental se coloca los altos índices de radiación solar e insolación que llegan a Cuba, siendo afectado por el efecto de la evaporación, que en el río Cauto llega hasta los 2.300 milímetros.
      Generalmente los Ríos de Cuba son cortos, rápidos y de escaso caudal. Por la gran cantidad de caliza que existe en Cuba muchos de ellos tiene cursos subterráneos, lo que potencia su irregularidad. Se diferencian dos vertientes: norte y sur. El río mas grande es el Cauto y el más caudaloso el Toa, ambos se encuentran en el oriente del país. Los ríos de la vertiente sur son ligeramente más largos.
     La mayoría de los ríos de Cuba corren en las direcciones norte y sur, aunque existen algunos que lo hacen en los rumbos este-oeste y son, precisamente, los más importantes en cuanto a longitud, extensión de la cuenca drenada y en caudales.